sábado, 4 de abril de 2015

En el claustro románico de Palamos existe un episodio histórico y arquitectónico previo a Madrid



El ¨maestro de Palamos¨ pudo trabajar en la ultima etapa del claustro románico del monasterio de Silos ¨Es un maestro que conocía Silos y que interpreta el estilo en un sitio cercano, probablemente años más tarde. Pero es también un gran maestro¨    

Las dovelas desmontadas muestran unas incisiones de sección decreciente, que en juntar las forman canales por donde verter cal que garantice una mejor unión entre las piezas. Esta es una práctica medieval que tiene razón de ser cuando se construye con mortero de cal o yeso, pero no con los morteros hidráulicos que probablemente se hubieran usado para una recreación del s. XX.  Por tanto, el sistema constructivo muestra trazas de antigüedad poco coherentes con una recreación historicista

Los canales incisos en forma de tridente de las dovelas, a las que el informe de la Generalitat no encontraba explicación, se realizaron “en el momento de numerar las piedras en 1629 para favorecer el deslizamiento de la argamasa en el momento del remonte, por eso no correspondían con la forma de construir medieval

La presencia de una numeración incisa de caligrafía claramente es un numero arabigo que Eduard Cabonell ha olvidado deliberadamente mencionarlo



Hay que añadir, además, otro dato importantísima: las dovelas no montadas en Mas del Vent muestran una numeración incisa de caligrafía idéntica a la que se utiliza en los escritos de finales del s. XVII; en las fotografías de 1959 de Palamós Sierra se puede comprobar que el desmontaje de Madrid las dovelas y sillares llegaron a Palamós marcados con números pintados en rojo (ahora desaparecidos).

 Hay más evidencias que cuestionan la "modernidad" del claustro. Se sabe por testimonios orales y documentales que las piezas llegaron con los camiones de Mateo Mateo con una numeración hecha con pintura roja. Pero las piezas desmontadas muestran claramente una numeración incisa, la epigrafía de (ver la imagen de una dovela-más arriba- con un 27 grabado). No digáis que no es extraño que un conjunto desmontado para llevarlo de Madrid en Palamós se numere dos veces. A ver si resulta que en Madrid llegó procedente de otro lugar lo estaba desmontado posiblemente de Salamanca, San Pedro de Arlanza o Burgo de Osma.

Opina Jaime Nuño, director del Centro de Estudios del Románico de la Fundación Santa María la Real, se centró en las propias contradicciones del informe y solicitó algún tipo de estudio complementario, como el estudio paleográfico de los números arábigos que aparecen en las dovelas y que pueden aportar datos sobre si hubo un montaje del claustro anterior a Ciudad Lineal  ese tipo de numeración es postmedieval,

Sobre la procedencia de la piedra no me voy ha entretener aquí, ya daré una explicación pero he de puntualizar .
El informe de la Generalitat no dice que la piedra empleada tenga un siglo de antigüedad. En realidad, este asunto sobre la antigüedad de la piedra no tiene importancia, porque es igual de antigua la que se emplea en la catedral de Burgos en el s. XIII que la que se usa en la Cartuja de Miraflores (también en Burgos) en el XV, tratándose en ambos casos de piedra procedente de la misma cantera. Lo que dice el informe es que sobre la piedra del claustro de Mas del Vent existen pátinas en las que se detectan materiales propios del s. XX, como si el dato tuviera un valor absoluto: "como sobre los capiteles hay pátinas con materiales que no existían con anterioridad al siglo XX, el conjunto tiene que ser del siglo XX". Evidentemente, pátinas del s. XX se encontrarán también sobre las piedras de Silos, de Las Huelgas o de cualquier otra construcción medieval. Si el claustro (como se dice en el informe del profesor Boto Varela, defensor de la autenticidad del mismo) fue trasladado de Salamanca a Madrid, remontado allí al aire libre, desmontado de nuevo, trasladado a Palamós y remontado otra vez allí, es obvio que debió de recibir tratamientos en el s. XX, sin que eso tenga nada que ver con el momento de labra de las piedras pero si de cuando se grabaron los numeros arabigos lo que nos indica que el claustro románico de Palamos existe un episodio histórico y arquitectónico previo a Madrid   




Y yo me referiré al párrafo numeración posmedieval es cierto la que dicha numeración de números arábigos fue hecha después del siglo XV exactamente en 1629 y fue hecha para desmontarla y posterior guardada para una posible reconstrucción en otro lugar

 Además, aseguran que las marcas de cantero, que no localiza por ningún lado, estan presentes en los arcos, sobre todo en las juntas, peron nunca en la cara visible ni en los elementos escultoricos, por razones evidentes la Generalitat “no han visto nunca una dovela medieval desmontada” y tampoco “conocen el comportamiento, usos y construcción de mortero de cal”, al negar que las incisiones de las dovelas de los arcos fueran para verter el mortero.



La observación cuidadosa de la fotos permite comprobar que diferentes piezas, particulamente las dovelas y arcos, presentaban una numeración pintada otra incisa y que cada pieza las cifras de una y otra no coinciden.

La incisa se conserva, pero la pintada no es visible ya que las dovelas y arcos depositadas al sol; no se si acaso  quedara rastro  en los arcos  montados desde 1959.
En todo caso es obvio que si la numeración incisa hubiera sido coherente con la posición que tenían las piezas al desmontarse en Madrid 1958 no habría habido ningún necesidad de pintar y fueron trazados por los operarios Mateu & Mateu, según el mencionado testigo de José Bosch y fueron considerados por la cuadrilla en encabezada por Joan Reinga.

Si los números incisos y marcas posiblemente de cantero no son del desmontaje madrileño es evidente que estos números pudieron constituir la guía y el orden cuando fue levantado en conjunto en Ciudad Lineal a partir 1931.


Detalle de una marca en uno de los arcos posiblemente una marca de cantero hecha antes del montaje madrileño en Ciudad Lineal 


Posible marca de cantero hecha en los arcos antes del montaje madrileño en Ciudad Lineal (Madrid)



Detalle de otra posible marca de cantero en otro de arcos diseminados por la finca del Mas del Vent Palamos



Detalle de otra marca posiblemente de cantero en otra de los arcos  diseminadas por la finca del Mas del Vent Palamos


Dovelas y arcos diseminados por el jardín de la finca del Mas del Vent Palamos



La observación cuidadosa de las fotos permite comprobar que diferentes piezas, particularmente las dovelas, arcos y fustes en su cara no visible una vez montado presentan una numeración incisa posmediaval.
Este trabajo tuvo que ser diseñado, labrado y montado por un taller especialista en este tipo de construcciones de aquella época. La observación cuidadosa de las fotos permite comprobar que diferentes piezas particularmente las dovelas, arcos, fustes presentan una numeración incisa posmedieval


Los fustes también presentan numeraciones incisas posmedieval 

Y si no se siguió esta numeración como pauta de disposición no hay todavía razón ni justificación considerarse ni mucho menos sostener que los números incisos y la  ranura de las dovelas se realizaron para el montaje de Madrid y justo antes de llevar a cabo. 


Las dovelas también presentan numeraciones incisas posmediaval 


Dovelas diseminadas por el jardín presentan numeraciones incisas posmedieval 

Por lo tanto también es cierto que dichos números arábigos fueron hechos después de la construcción en el siglo XII pero grabados en su desmontaje en el siglo XVII para montar en otro lugar, si no ,que misión tenían la de hacer una dovela un grabado de un numero arabigo ¿para hacer más creible la falsedad? esta actuación de ocultacion nos es científica ni ética.

Algunos de los sillares reflejan la intensa y continua acción del fuego


Sin embargo, las piedras presentan señales de su larga historia, que hay que saber leer. Una de ellas es que la evidencia que la construcción sufrió, en parte, un importante incendio que hizo que algunos de sus sillares presenten un característico color rojizo fruto de la alta temperatura, además de una pérdida de superficie por el efecto del fuego. Así lo pudo comprobar Jaime Nuño, arqueólogo y director del Centro de Estudios del Románico de la Fundación Santa Maria la Real, que el pasado viernes accedió al claustro situado en la finca del Mas del Vent en la Fosca, Palamós.


 Detalle de unos sillares y dovelas que han sufrido la acción del fuego

Para Nuño no hay duda de que los sillares situados en una de las esquinas de la construcción, en concreto la que queda en el lado derecho que hay junto a la piscina “estuvieron expuestos a una alta temperatura durante varios días, motivado seguramente por la quema de las maderas que cubrían las galerías claustrales”. Nuño, el arquitecto y dibujante Peridis, presidente de la Fundación, el profesor de arte medieval de la Universidad de Girona, Gerardo Boto y el presidente de la Asociación de Amigos del Románico, Juan Antonio Olañeta, valoraron que probablemente un fuego intenso durante horas pudo causar esta alteración de la piedra.

No existe constancia de un incendio de ese tipo desde 1931, año en que el claustro llegó desmontado, desde Ciudad Lineal (Madrid)

Dice Marius Vendrel en unos de sus email : Carbonell y demás sabían, porqué así se lo habíamos manifestado, de ese desmontaje de Salamanca, pero como las instrucciones eran negar la mayor (que el claustro sea románico) decidieron no dar importancia alguna a esa numeración barroca, ni al hecho que llegó a Palamós con esa numeración más otra pintada de números rojos. En el informe, creo que de Masalles, insisten que la caligrafía de la numeración incisa "se asemeja a la del s XVIII, sin que ello sea una prueba de esa cronología". No te jo...! como no cites el espíritu del que los gravó, nunca se podrá tener esa certeza. Ni de eso, ni de la existencia de Isabel la Católica, por poner un ejemplo. Es que es indignante!

En fin... eso es lo que hay y con esos bueyes son con los que aramos.


Foto finales de los años 50 tomada en la finca del Mas del Vent Palamos con su tercer ala construida.

El claustro románico de Palamos tenía tres alas pero una se cayó.Hoy día las dovelas, fustes y arcos están diseminados por el jardín como podemos comprobar en las fotos anteriores de la finca del Mas del Vent Palamos

 El claustro del Mas del Vent de Palamós tenía originalmente tres alas y no dos como muestran ahora las imágenes más recientes del conjunto. Una de ellas cayó por la inestabilidad del terreno, tras ser montada a finales de los años 50.

Lo que sí podemos saber hoy  ​​es que las dos alas del claustro que hay montadas en el interior de la finca no son las que había inicialmente. Concretamente, a finales de los años 60 se construyeron tres pero, por problemas de construcción, una de ellas terminó cayendo y no fue reconstruida otra vez. (Ver foto con detalle y observen como existía una tercera ala montada como en  Ciudad Lineal  Madrid de donde procedía el claustro).

Dice Alex Masalles i Rivera  coservador-restaurador del Museo Nacional de Catalunya sobre las numeraciones de las piedras canales por donde verter cal

Dice Masalles:
La numeración en cifras arábigas incisas Hecho durante el proceso de fabricación del claustro por mismos picapedreros para llevar un control de las piezas hechas y de su correspondencia con el proyecto o durante el desmontaje del claustro en Ciudad Lineal antes de su transporte en hacia Palamos

Y contesto:
Sobre el informe  Alex Masalles i Rivera  coservador-restaurador del Museo Nacional de Catalunya  un cantero daría un mejor informe que los 185 folios que ha escrito para decir que el claustro románico de Palamos es falso

Julián Ortiz y su familia fotografiados 1931-32 en un ángulo de claustro en Ciudad Lineal (Madrid) observar la piezas del claustro a mano derecha amontadas lo que quiere decir que vinieron en camiones sin embalar y los capiteles, arcadas, fustes, basas ya terminas de algún lugar y en completo desorden, fijándonos con más precisión vemos en uno de los arcos la ya referidas incisiones de sección decreciente, que en juntar las forman canales por donde verter cal que garantice una mejor unión entre las piezas seguramente la piedras ya vendrían grabadas también con los números arábigos ya mencionados




Foto año 1931 Julian Ortiz con su familia en Ciudad Lineal (Madrid) sentado en las piedras del claustro románico de Palamos que vinieron de algun lugar indeterminado para montar en Ciudad Lineal (Madrid)




Julián Ortiz, sombreado en la imagen del diario ABC.
 Más complicada había sido aún la aventura de los Ortiz. Perdida la guerra para los republicanos, Julián tuvo que dejar Ciudad Lineal para huir a Francia, donde fue recluido en un campo de trabajo. La amistad con algún miembro del Ejército alemán le permitió mostrar sus habilidades como restaurador incluso en plena Guerra Mundial. De nuevo el oficio le salvaba la vida. Julián regresó a Madrid en un destacamento de repatriados en 1943. La prensa mostraría muchos años después una imagen de aquella secuencia histórica.

Ya en Ciudad Lineal, Julián Ortiz intentó hacerse con la propiedad de la finca donde aún se erigía el claustro románico. Sus esfuerzos fueron en vano y el terreno acabó en manos de las Esclavas de la Eucaristía, la congregación que impulsaría el colegio Madre de Dios.
En 1958, «unos señores vinieron a llevarse el claustro», recuerda la familia Ortiz. De la ilusión del pasado a la cruda realidad del presente. A los niños no les dejaban acercarse al claustro mientras duraban las tareas de desmontaje. Los Ortiz sentían que les «robaban» el pasado. Los felices años de Ciudad Lineal terminaban.
Como pudo, Julián Ortiz se fue ganando la vida hasta montar su propio taller de restauración en los años cincuenta. Había aprovechado su regreso desde la Europa en guerra para especializarse en la técnica de las lacas chinas, ornamento de muebles y biombos. Aquella especialidad le permitió prolongar su oficio más allá de los 65 años y sirvió para que dos generaciones más se ganaran la vida.

Quizá les guste saber que aquel taller de la posguerra es hoy un museo vivo en un sótano de la calle Claudio Coello de Madrid. Alberto y Eduardo Ortiz continúan con la actividad de la restauración y esperan, nos dicen, jubilarse practicando todavía hoy la técnica heredada del bisabuelo.

Según relatan padre e hijo al unísono y con precisión de fechas, las piedras del conjunto llegaron a Madrid en 1931 ¨no se refiere a sillares ni capiteles¨se refiere a piedras ¨estalleadas¨desde un lugar indeterminado. Las compró Ignacio Martínez , un anticuario “de gran prestigio y reconocimiento en el Madrid de entonces”.Las piedras de los sillares ( Juan Manuel Ortiz se refiere solo ha los sillares ¿ los capiteles donde se hicieron?) las piedras como antes hemos dicho venían posiblemente de Villamayor ëstelleada¨se instalaron en un solar que le cedió una conocida suya, “una marquesa”, situado entre los números 7 al 11 de la calle Ángel Muñoz, en el actual distrito de Ciudad Lineal. “Quería montarlo para venderlo a un americano rico”, aseguran.

En el informe de  Alex Masalles i Rivera.me he encontrado con estas perlas

El claustro en cifras

* Peso total del claustro trescientas noventa y una toneladas
 * Tiempo de ejecución dos años
 * Tiempo para la talla de cuarenta y cuatro capiteles un año y medio
 * Numero de galerías montada en ciudad lineal cuatro
 * Numero de galerías montadas en Palamos tres


Foto del claustro de Palamos en Ciudad Lineal hecha por el Periódico ALCAZAR en 1956


Foto En Ciudad Lineal (Madrid) el cuarto ala del claustro quedo desmontada por causa de Guerra Civil 

Me resulta extraño que, si el claustro –tal como se indica en el citado informe - fue labrado a comienzos del pasado siglo , no exista ni documentación ni otros datos que justifiquen el encargo y el destino del mismo, así como sobre los correspondientes presupuesto previo y pago de una obra de semejante envergadura. Este trabajo tuvo que ser diseñado, labrado y montado por un taller especialista en este tipo de construcciones, dotado a su vez de medios suficientes y apropiados: dibujantes, delineantes, jefes de obra, artistas y picapedreros altamente especializados para el diseño y el tallado de los capiteles y los arcos que lo conforman facturas etc.. 

Me resisto a creer que no se tenga noticia alguna de dicha empresa/taller, ni exista documentación o publicación al respecto en los años a los que el informe atribuye su ejecución. Como es posible que se muevan trescientas noventa y cuatro toneladas, su tiempo de montaje sea de dos años y el tiempo para la talla de cuarenta y cuatro capiteles se de un año y medio como indica Alex Masalles i Rivera en su informe de un claustro que igual o superior al del monasterio de Silos. Esta es una de las razones que me inducen a dudar de la veracidad de lo que en el citado informe se afirma.

Pero hay otras también.

El informe de la Generalitat no dice que la piedra empleada tenga un siglo de antigüedad. En realidad, este asunto sobre la antigüedad de la piedra no tiene importancia, porque es igual de antigua la que se emplea en la catedral de Burgos en el s. XIII que la que se usa en la Cartuja de Miraflores (también en Burgos) en el XV, tratándose en ambos casos de piedra procedente de la misma cantera. Lo que dice el informe es que sobre la piedra del claustro de Mas del Vent existen pátinas en las que se detectan materiales propios del s. XX, como si el dato tuviera un valor absoluto: "como sobre los capiteles hay pátinas con materiales que no existían con anterioridad al siglo XX, el conjunto tiene que ser del siglo XX". Evidentemente, pátinas del s. XX se encontrarán también sobre las piedras de Silos, de Las Huelgas o de cualquier otra construcción medieval. Si el claustro (como se dice en el informe del profesor Boto Varela, defensor de la autenticidad del mismo) fue trasladado de Salamanca a Madrid, remontado allí al aire libre, desmontado de nuevo, trasladado a Palamós y remontado otra vez allí, es obvio que debió de recibir tratamientos en el s. XX, sin que eso tenga nada que ver con el momento de labra de las piedras.

Como apunto en un párrafo anterior, no existe documentación sobre la empresa o taller que recibió el encargo de poner en pie esta obra (lo cual, insisto, me resulta difícil de creer si el claustro fue ejecutado a principios del siglo pasado). Pero si el claustro (según el informe de la Generalitat) lo manda elaborar un anticuario zamorano afincado en Madrid, con intención de exponerlo de cara a su venta en la Ciudad Lineal, ¿cómo es que se emplea para su ejecución piedra de las canteras de Villamayor en Salamanca, con lo que debía de costar su transporte hasta Madrid? ¿No existían canteras de piedra arenisca más cercanas?

Otro de los argumentos empleados para negar la veracidad del claustro es que se levanta sobre un zócalo mínimo, muy bajo. Por esa regla de tres, Las Claustrillas de Las Huelgas, el claustro alto de Silos (que conozco porque forman parte de la tierra que habito), o el de Sant Sebastià dels Gorgs (en el Penedès y que he visitado personalmente), entre otros muchos, deben de ser falsos. Pero no se acaba ahí la cosa: otro argumento utilizado a favor de la falsedad del claustro de Palamós es que sus capiteles adosados a machones no forman parte de los sillares que conforman los propios machones, sino que se limitan a apoyar contra ellos; siguiendo ese razonamiento, determinados capiteles de la catedral vieja de Salamanca, de Silos o de la catedral de Mondoñedo tienen que ser, por fuerza, falsos.

Mi vaticinio sobre este espinoso tema (espinoso por los enfrentamientos académicos que conlleva y por los intereses privados y políticos que pueden estar en juego), es que pasarán años para esclarecer este enigma y que, entonces, cuando al fin sea resuelto en base a la credibilidad de los argumentos y las pruebas aportados, algunas de las eminencias que, en este debate, han dado –o quizás prestado-  su opinión y su firma pueden quedar marcados a fuego para siempre. Así lo pienso y así deseo que suceda. Y que sea pronto.

De los testimonios de loa canteros de Villamayor  se desprende  una interesante conclusión. La cantidad necesaria para la reconstrucción o recreación del claustro requería de«muchos meses de trabajo, quizá años» apuntan que en las primeras décadas del siglo XX, la cantidad diaria extraída de las canteras no llegaba al metro cúbico. Hay que tener en cuenta que los canteros de la época se limitaban a extraer el recurso que radicaba en la superficie (por falta de maquinaria para profundizar en la explotación) y, precisamente, «la piedra que está arriba es la más dura y la que mayor esfuerzo conlleva su extracción»
.
Esta puede ser la principal razón de que la obra de Ciudad Lineal comenzara en 1931 y se alargara hasta el inicio de la Guerra Civil (1936), cuando las galerías estaban prácticamente terminadas. Según esta hipótesis, la obra avanzaba en función de la extracción de la piedra, cuyos plazos condicionaban la posterior talla y la colocación de las piezas en el claustro. Con lo que se deduce que los capiteles, fustes, arcos, dovelas, sillares etc, vinieron de Salamanca como prueba la Foto año 1931 Julian Ortiz con su familia en Ciudad Lineal (Madrid) sentado en las piedras del claustro románico de Palamos que vinieron de algun lugar indeterminado para montar en Ciudad Lineal (Madrid) quiere decir que taller de canteria habia eb Salamanca en 1931 patiendo de la base que este trabajo tuvo que ser diseñado, labrado y montado por un taller especialista en este tipo de construcciones, dotado a su vez de medios suficientes y apropiados: dibujantes, delineantes, jefes de obra, artistas y picapedreros altamente especializados para el diseño y el tallado de los capiteles y los arcos que lo conforman facturas etc..en Salamanca existió dicho taller lo dudo. 


https://youtu.be/6qqDsdSD8NU







5 comentarios:

  1. Apenas reaccionamos sobre el claustro románico de Palamos somos ratas de laboratorio para ver que nivel de castigo y sufrimiento aceptamos
    Está el frente de los indignados como yo que no me canso en decir que el claustro romanico de Palamos es autentico y algunos como el geólogo y profesor de la Universidad de Barcelona, Màrius Vendrell, que junto con el profesor Gerardo Boto sostienen la autenticidad románica del claustro tambien el hispanista alemán Helmut Schlunk, colaborador de de Gómez-Moreno avalan su autenticidad. Pero el despotismo de las autoridades de la Generalitat es hoy heredero en sus formas y comportamiento de las de aquella administración franquista que las conoce a buen seguro- en la que todo tipo de abusos y arbitrariedades, en lo que a patrimonio artístico se refiere, fueron permitidos y ocultados al abrigo de la falta de libertades. el ultimo informe de Eduard Carbonell no ha tenido éxito.

    Y pienso que es porque la gente tiene miedo de perder su trabajo y sus prevendas. Yo comprendo ese miedo, en Cataluña nadie va ha morder la mano que les da de comer , solo un trozo del claustro románico de Palamos es más autentico, que el diagnostico que los investigadores que han participado en su elaboración diciendo que es falso entiendo su posición que es comprometida con la Generalitad pero seria más digno dimitir de sus cargos. porque el miedo es la disciplina de una sociedad que antepone sus intereses frente a verdad de la historia, que usa el miedo individual para disciplinar y calmar la población con el objetivo de que acepte lo que le digan sobre el claustro romanico de Palamos. De hecho, creo que los griegos y los españoles son como ratas de laboratorio para ver qué nivel de castigo y sufrimiento puede ser aceptado por esta sociedad sin que la gente se rebele sobre los informes que se hacen.

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  2. Esto va más allá de la venganza pura de unos catedraticos que dan un informe falso sobre el claustro románico de Palamos que dicho informe esta compuesto de 1,200 paginás sin un rigor academico medianamente aceptable presentado por la Generalitad, la destrucción completa de la soberanía nacional y la falta de esperanza de alivio

    Probablemente pretende ser una oferta que no podamos aceptar; pero aun así, es una traición grotesca y nos toman por tontos de todo lo que lo se supone que representa”
    “Lo que hemos aprendido es que ser catedratico como es Eduard Carbonel y haciendo dicho informe no significa que los los demas pueden creerse lo escrito en dicho informe si se sale del redil. Esto no tiene nada que ver con el arte sino interese espureos inconfensable”
    “El claustro romanico de Palamos simplemente ha sufrido un golpe terrible, tal vez fatal (…) más de los ochocientos años que han pasado desde su construccion en tierra de Burgos y no han sido los catalanes quie han dado el gope de gracia

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  3. Los aliados de los argumentan que el claustro románico de Palamos es falso es una cantinela que he oído muchas veces y que me cansa y me incomoda, incluso cuando yo no pretendo buscar culpables de a los que hicieron un informe de 1.200 folios para la Generalitad por Eduard Cabonell , sino dialogar con todos aquellos que dicen que dicho claustro románico es falso .No dejen los amantes del románico que los altavoces de la Generalitad nos reduzcan tragar con ruedas de molino dicho informe que tiene unos interese espurios e inconfesables

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  4. La parrala del claustro romanico de Palamos

    El claustro, dicen que era falso,
    otros aseguran que fue de Salamanca,
    pero nadie pudo de fijo sabé
    de dónde sería el claustro románico de Palamos. .

    Unos decían que sí,
    otros decían que no,
    y pa dar más que decí
    la Parrala así cantó:

    ¿Quién me compra este misterio?
    Adivina adivinanza;
    ¿Por quién llora, por quién bebe,
    por quién sufre el claustro?

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  5. La manipulación sobre el claustro romanico de Palamos no consiste en una mentira, sino en no explicar toda la verdad.
    Las fuentes de la historia sobre claustro de Palamos, tanto las de los investigadores que trabajaron para la Generalitad como las que se puedan utilizar en cualquier trabajo de investigación, no están exentas de manipulación, como es bien conocido. Los ejemplos de manipulación sobre la investigación de la autenticidad de claustro de Palamos son numerosos y es importante señalar que, casi nunca responden a simples errores u ignorancia.

    Por lo tanto, la falta de un análisis crítico de las fuentes es una de las causas que generan errores y falsedades en el relato sobre la historia de este claustro; esta falta de análisis no se da únicamente en aquellos contextos en donde el estado nacional lo requiere como es caso de la Generalitad. Lo ejemplos son múltiples y tan abundantes que resulta difícil elegir.

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